Silas Speckmann, un joven de 18 años de la provincia holandesa de Overijssel, es un hombre con muchos talentos. Actualmente compagina un trabajo en la fiscalía alemana con una activa carrera en el balonmano de playa, con puestos tanto en la selección holandesa como en el HSG Nordhorn-Lingen, de la Bundesliga alemana.
Speckmann juega al balonmano playa desde que su madre vio un anuncio de la selección holandesa sub-16 cuando tenía 12 años. Hizo una prueba por capricho y, dos semanas después, se enteró de que se había ganado una plaza. Ahora es una estrella en ascenso dentro de este deporte.
Antes de trasladarse a Nordhorn (Alemania), Speckmann jugó en el Hiekka Hauska de los Países Bajos y formó parte de la selección masculina junior holandesa. Se colocaron entre los cinco primeros en los Campeonatos de Europa de Balonmano Playa 2019 en Polonia, donde Speckmann fue nombrado MVP.
En el torneo Albert Mulder 2020, en Borne, su equipo quedó en primer lugar en la división A y 2nd en el masculino. Esta victoria le resultaba especialmente cercana, ya que el torneo llevaba el nombre de su abuelo.
Speckmann forma parte ahora de la selección masculina absoluta de balonmano playa de Holanda. En los Campeonatos de Europa de 2021, celebrados en Bulgaria, Holanda quedó en 13th en general, su mejor actuación en la Eurocopa hasta la fecha. Uno de sus muchos goles, una acrobática pirueta, fue nombrado el mejor del torneo.
Speckmann es optimista sobre el futuro de Holanda en los Campeonatos Europeos de Balonmano Playa, y espera quedar finalmente entre los cinco primeros. Dice: "Ya estamos experimentando mucho y estamos ganando experiencia. Si se unen a nosotros más chicos buenos, podremos compartir nuestra experiencia".